50 Oraciones Edificantes Por Un Nuevo Trabajo

Comenzar en un nuevo trabajo es muy emocionante, pero también puede arruinarte los nervios y ponerte ansioso. Como todo lo que se te presenta es inesperado, no puedes prepararte para todo. En cambio, lo que puedes hacer es orar a nuestro amoroso Dios para que sucedan las mejores cosas.

Aquí Hay Oraciones Edificantes Para Un Nuevo Trabajo

-Oh Señor Todopoderoso, tú eres nuestro Padre supremo en el cielo. Cuando pienso en mi vida hasta ahora, encuentro que siempre he sido inmensamente bendecido por tu mano poderosa en el trabajo. Les agradezco este nuevo trabajo y lo tomo como una bendición de su parte.

-Querido Dios, te pido que me dejes trabajar en este nuevo trabajo de tal manera que pueda agregar gloria y honor a tu nombre. Mientras sigo tu Palabra llena de gracia, encuentro que esperas que pongamos todo nuestro corazón y alma en cualquier trabajo.

-Oh Señor, permíteme ver este trabajo como una oportunidad para servir al Señor y no solo a los maestros humanos bajo los cuales trabajo. Que el trabajo sea una dedicación a su ayuda y apoyo en nuestras vidas que me ayudó a conseguir el trabajo en primer lugar.

-Padre bueno, quiero que seas la luz que guíe mi camino a lo largo del día, y quiero que controles mis acciones para que cada obra que haga, siempre la haga en tu poderoso nombre. En todas mis actividades, todos deben poder comprender su asistencia.

-Oh Señor, creo que ciertos asuntos en el lugar de trabajo, los desafíos de un nuevo trabajo y otras cosas pueden hacer que me sienta cansado y desinteresado. Entonces, te pido que me mantengas con energía y me des la resistencia necesaria para apegarme a lo que estoy a punto de hacer ahora.

-Padre bendito, quiero que bendigas mi corazón y me des sinceridad y obediencia en mi trabajo para que pueda aprender de los maestros profesionales en mi trabajo y saber que ellos también son tus hijos y que tú los has enviado para ayudarme a crecer en Mis habilidades.

-Querido Señor, déjame ser el empleado perfecto en mi trabajo para que pueda trabajar con responsabilidad y luego ser recompensado con una herencia que vendrá de ti. Gracias por llenar mi corazón con este hoy inexplicable al conseguir el trabajo. Eres el mejor padre de todos.

-Oh Padre, al salir en mi primer día en mi nuevo trabajo, me inclino ante ti y tomo tus bendiciones. Quiero que me muestres la forma correcta de hacer cada tarea para que se haga como a tu alcance. Mantenme alejado de los errores.

-Querido Dios, te pido que despejes mi mente de todos esos pensamientos y asuntos que continúan distrayéndome y apartando mi atención de lo que es más importante en este momento: mi nuevo trabajo. Ayúdame a concentrarme para que pueda aprender mejor y más rápido.

-Oh Padre, hoy me siento ante ti y paso unos momentos en oración silenciosa antes de ponerme a trabajar. En estos momentos, te pido que me des positividad y alegría. Hazme amable para que todavía pueda dedicarme completamente a ti, incluso mientras trabajo.

-Buen Dios, infunde en mi mente y corazón tu valentía y sabiduría piadosas para que me ciña a mi trabajo mientras quede inconcluso, y lo haga con total concentración y dedicación. Que mi trabajo refleje la excelencia que he ganado con años de práctica y aprendizaje.

-Padre, cada palabra que hable en el lugar de trabajo, quiero que salga de mi boca que ha sido bendecida por ti. De esa manera, estaré seguro de que estoy diciendo solo las palabras correctas a mis superiores y compañeros de trabajo. Permíteme comportarme correctamente con todos.

-Querido Padre Santísimo, tú eres la fuente de toda mi fuerza e inspiración. Es solo por tu poderosa presencia que puedo sentir esta confianza piadosa dentro de mí. A través de ti, cada trabajo que ponga en mi mano será posible y nada podrá impedirme alcanzar el éxito.

-Querido Señor, permíteme siempre recordar y creer en mi corazón que mi fortaleza como individuo proviene de mi identidad de que soy tu hijo bendito. Padre, guíame en la dirección en la que pueda trabajar para cumplir el destino que me has trazado en la vida.

-Buen Señor, quiero que grabes en mi corazón permanentemente que mi competencia en el trabajo es un don del Espíritu Santo en ti. Ayúdame a cambiar mi enfoque de lo que la gente espera de mí a lo que yo espero de mí mismo. Que no compita con mis compañeros de trabajo.

-Señor, enséñame las formas en que puedo enfocarme en ayudar a otros en el lugar de trabajo para que pueda desarrollar una buena relación con las personas con las que trabajo y promover un sentido de hermandad. Dame la eficiencia y prontitud de un empleado profesional con sentido de la responsabilidad.

-Padre Todopoderoso, siempre he creído que los sentimientos de duda o de inadecuación pueden ser muy perjudiciales para la confianza en uno mismo de una persona. Te ruego que nunca dejes que estos sentimientos me controlen. Nunca debo juzgarme por hacer algo si no tengo las razones adecuadas para hacerlo. 

-Querido Señor, tú eres el poderoso hacedor de milagros. Allanas nuestro camino con tus propias manos, y todas mis habilidades y talentos son un regalo tuyo. Mientras asumo este nuevo trabajo, les pido que se aseguren de que nunca repita los errores que he cometido antes.

-Santo Padre, sólo debo trabajar en mi desarrollo y tratar de alcanzar la excelencia en mi trabajo. Una vez que haya comenzado mi trabajo, no debe mirar hacia atrás a mis días anteriores ni meditar sobre mis incapacidades y debilidades. Dame todo el poder y la fuerza que puedas.

-Oh querido Padre, bendíceme con tu poderosa gracia para que pueda trabajar muy duro, nunca ser holgazán y tomar iniciativas y decisiones adecuadas cuando sea necesario. Siempre debo tener una actitud optimista con cada palabra que me den, y no hay nada a lo que le diga ‘no’.

-Dios mío, mientras estoy en el trabajo, que nada me quite el enfoque. Mantenme alejado de todas las tentaciones del cuerpo y la mente, y permíteme concentrarme únicamente en mi trabajo. Permitirme ser capaz de brindar soluciones eficientes a los problemas que se presenten en el ámbito laboral.

-Oh Bendito Señor, te pido hoy que no debe haber limitaciones a mis capacidades. Siempre que pueda, permítanme hacer un esfuerzo adicional en todos los aspectos. Que todas mis acciones sean en tu nombre y alaben tu gloria. Quédate conmigo y guíame.

-Padre, tengo inmensa confianza en que eres el guardián más amoroso que conozco, y cada día nos bendices con nuevas y mejores misericordias. Antes de ir a mi nuevo trabajo, te pido fortaleza física y mental para poder trabajar con vigor durante todo el día.

-Querido Dios, sé que habrá días que me harán sentir fuera de foco, y probablemente querré rendirme o tomar atajos para hacer mi trabajo. En estos momentos te pido que me alejes de la tentación que me obliga a engañar.

-Padre, te pido que me permitas hacer las cosas que me ayudarán a sobrellevar las situaciones difíciles en el trabajo. Debo descansar adecuadamente, comer alimentos saludables y hacer ejercicio regularmente para estar en forma. Debo meditar de vez en cuando y practicar reunir mis pensamientos para tener flexibilidad mental.

-Bendito Señor, mi corazón está seguro cada vez que me recuerdo que tengo tu bendición sobre mí constantemente. Esta vida, y todo lo que hay en ella, es el resultado de tu obra y gracia sobre mí. Obtendré mi pan de cada día de este nuevo trabajo que es una bendición de su parte.

-O querido padre, para un trabajo, necesito tener las habilidades de comunicación adecuadas. Bendíceme para que pueda hablar correctamente. Mis interacciones con mis jefes y compañeros de trabajo deben ser efectivas y destacadas. Deben poder sentir que he sido entrenado por tu poderosa Palabra.

-Señor Todopoderoso, ayúdame a ser un buen oyente en el lugar de trabajo para que mis superiores entiendan que soy un empleado obediente y sé cómo seguir las instrucciones. Modere mi lenguaje corporal de manera que solo dé las señales adecuadas y mis palabras nunca exudan negatividad.

-Señor, dirige mis actividades de tal manera que parezca una persona amable a mis colegas y puedan aceptarme fácilmente como parte de su equipo. Enséñame a ser útil y cooperativo para que se pueda promover un mejor trabajo en equipo sin los sentimientos de competencia.