No necesito un montón de amigos, sólo unos cuantos de los que pueda confiar. Gracias amigo mío por tu amistad.
Algunos de mis mejores amigos son familiares.
Otros los he conocido desde que era un niño.
Y otros son nuevas amistades que continúan haciéndose más fuertes cada día.
Aunque todos son muy diferentes, cada uno de ellos es extraordinario.
No sería quien soy hoy sin estas personas en mi vida.
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Y a pesar de que lo sé, a menudo doy por sentado a mis mejores amigos.
Me olvido de agradecerles, por casi todo. Así que aquí está mi intento de arreglar el récord:
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“Gracias por hacer tantos momentos ordinarios, extraordinarios”. – Sí, a veces las cosas más comunes se pueden hacer extraordinarias, simplemente haciéndolas con las personas adecuadas.
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“Gracias por siempre darme el empujón extra que necesito”. – Un mejor amigo es alguien que te inspirará, para que seas quien siempre supiste que podrías ser. Mantén esto en mente. Cualquiera que te ayude a hacer que tus esfuerzos sean más sinceros a través de la amabilidad, el compromiso y el trabajo en equipo, esta persona de los tuyos.
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“Gracias por decirme la verdad”. Recuerda, ser honesto no siempre te dará muchos amigos, pero siempre te dará los correctos. Muchos de nosotros preferimos las mentiras piadosas a las verdades difíciles. Pero no se equivoquen, al final es mejor sentirse herido por la verdad que reconfortado por una mentira. Los mejores amigos se dicen la verdad, siempre.
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“Gracias por hablar conmigo”. Muchos problemas en el mundo desaparecerían si nos habláramos en lugar de hablar de los demás. Por eso, comunícate siempre con los más cercanos a ti, incluso cuando no sea fácil o sea un poco incómodo.
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“Gracias por encontrarme a la mitad”. Los mejores amigos finalmente se encuentran en el medio. Cuando hay un desacuerdo, encuentran una solución que funciona para ambas partes: un compromiso, en lugar de la necesidad de que la otra persona cambie o ceda por completo.
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“Gracias por no estorbar las otras partes importantes de mi vida”. Una relación saludable nunca requerirá que sacrifiques tu felicidad, tus otras relaciones importantes, tus sueños o tu dignidad.
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“Gracias por ser compasivo”. – Permite que tu amabilidad y compasión se te devuelva. Siempre da a los que te rodean el “descanso” que esperas que el mundo te dé en tu propio “mal día” y nunca lo lamentará.
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“Gracias por pensar en mí tan a menudo como lo haces”. – Haz pequeños gestos a diario para mostrar a tus mejores amigos que te importan. Saber que una persona en la que a menudo piensas te tiene en mente también significa mucho.
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“Gracias por los cumplidos”. – Es bueno ser piropeado, ¿no es así? No pierdas la oportunidad, ni una sola oportunidad, de decirle a alguien que te importa lo maravillosos que son y lo bellos que son, por dentro y por fuera.
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“Gracias por dedicarme tiempo a mí”. – Cuando eres importante para otra persona, siempre encontrarán la manera de hacer tiempo para ti, sin excusas, ni mentiras ni promesas rotas.
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“Gracias por tu presencia plena”. El mejor regalo que puedes dar a alguien que te importa es la pureza de tu plena atención. Eso es lo que hacen los mejores amigos el uno por el otro cada vez que están juntos.
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“Gracias por saber cuándo algo está mal conmigo”. Algo muy sorprendente sucede cuando nos prestamos mucha atención. Nos ayudamos mutuamente a sanar, a veces incluso antes de hacernos daño. Una persona que realmente te conoce y te ama, un mejor amigo, es alguien que ve el dolor en tus ojos, mientras que todos los demás siguen creyendo la sonrisa en tu rostro.
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“Gracias por hacer un esfuerzo adicional para entenderme”. – Es mucho más fácil juzgar a las personas que entenderlas. La comprensión requiere más bondad y paciencia. Y este “extra” siempre vale la pena.
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“Gracias por no actuar, juzgarme o tratarme como si me conocieras mejor que a mí mismo”. Gracias amigo por tu amistad.
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“Gracias por estar dispuestos a estar equivocados”. Algunas veces debemos elegir estar equivocados, no porque realmente estemos equivocados, sino porque valoramos nuestra relación más que nuestro orgullo.
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“Gracias por apoyar mis decisiones”. No escuches a quienes te dicen exactamente qué hacer. Escucha a esos pocos especiales que te alientan a hacer lo que ya sabes en tu corazón que es correcto.
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“Gracias por ser leal, incluso cuando estamos separados”. Los mejores amigos no se separan, incluso cuando están separados.
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“Gracias por estar allí en los buenos y malos momentos”. – Las personas que te apoyan en tu peor momento merecen disfrutar de estar contigo en tu mejor momento. De hecho, lo mejor de los días más difíciles de tu vida es que puedes ver quiénes son realmente tus verdaderos amigos. Las personas que realmente merecen el estatus de “mejor amigo” son las que te ayudan en los momentos difíciles y se ríen contigo después de que pasan los tiempos difíciles.
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“Gracias por saber que no siempre puedo ser fuerte”. – A veces debemos decepcionar a un amigo porque no podemos sostenerlo. Pero “no puedo cargarte” no significa “no te quiero”. Puede que simplemente signifique “yo también estoy luchando”.
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“Gracias por enfrentar los problemas conmigo”. Los mejores amigos son aquellos que hacen que sus problemas sean sus problemas también, solo para que no tengas que pasarlos solo. No busques a alguien que resuelva todos tus problemas. Busca a alguien que los enfrente contigo.
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“Gracias por salir de su camino por mí, incluso cuando no es conveniente”. Nunca querrás perder el tiempo con alguien que solo quieres que esté cerca cuando sea conveniente para ellos. Porque de eso no se trata la verdadera amistad.
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“Gracias por querer estar ahí para mí”. La verdadera amistad nunca se carga con promesas y obligaciones estresantes. Lo que los mejores amigos hacen unos por otros debe hacerse porque les importa y porque quieren hacerlo. Punto.
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“Gracias por caminar la conversación”. Cuando caracterizamos a las personas por sus acciones, nunca nos dejamos engañar por sus palabras. Los mejores amigos no solo conversan sino que lo demuestran.
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“Gracias por creer en mí”. Es asombroso lo lejos que estás dispuesto a llegar cuando alguien cree en ti.
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“Gracias por alentarme cuando tropiezo”. – Devuelve el favor cuando tú también puedas. Tenemos suficientes críticos. Se un animador. Una sincera palabra de aliento después del fracaso vale más que un día de alabanza después del éxito. Sé una bendición. Sé un amigo. Anima a alguien especial. Tómate el tiempo para cuidar. Deja que tus palabras sanen, y no hieran.
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“Gracias por usar palabras cariñosas”. – Puede medir la felicidad de cualquier relación cercana por la cantidad de cicatrices que cada miembro tiene en sus lenguas y mejillas internas, que se formaron después de muchos años de reprimir palabras enojadas e insensibles.
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“Gracias por aceptarme tal como soy”. Un mejor amigo es alguien que realmente te conoce y te ama de la misma manera. No cambies para que la gente te quiera. Sé tú mismo y las personas adecuadas amarán a tu verdadero yo.
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“Gracias por hacerme sentir cómodo en mi piel”. – Este es un recordatorio tan importante. Sé el tipo de persona que hace que todos los que te encuentres se sientan perfectamente bien y cómodos siendo exactamente quienes son.
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“Gracias por simplemente disfrutar de mi compañía”. – Muchas relaciones fracasan porque dedicamos más tiempo a señalar los errores de los demás y no a disfrutar de la compañía de los demás.
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“Gracias por valorar mi tiempo”. Cualquier persona que sea el mejor material de amistad valorará su tiempo. Listo. Nunca pierdas tu tiempo con alguien que no te valora.
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“Gracias por mostrarme que estás agradecido de tenerme en tu vida”. Mostrar gratitud es una de las cosas más simples y poderosas que los humanos pueden hacer el uno por el otro.
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“Gracias por apoyarme para que me convierta en una prioridad”. Recuerda: ponerse primero no significa ser “egoísta”, significa estar consciente de tí mismo. Significa no olvidar amarte a ti mismo, también.
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“Gracias por amarme sinceramente”. Nada cambia el mundo para mejor, como una persona que decide amar a otra persona, sin importar qué. Hoy invierte tu amor en alguien especial y agradece a esos amigos especiales que invierten su amor en ti.
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“Gracias por ayudarme a amarme más también”. Lo que le das a otra persona es realmente lo que te das a ti mismo. Cuando tratas con amor a las personas que te importan, aprendes que también eres adorable.
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“Gracias por todas las pequeñas cosas que haces que hacen una gran diferencia”. – Presta atención a las pequeñas cosas, porque cuando realmente extrañas a alguien, extrañas las pequeñas cosas más, como reírse juntas.
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“Gracias por ser paciente y perdonador cuando te encabrono”. – No importa lo honesto y amable que seas, de vez en cuando molestaras a las personas más cercanas a ti. Y es precisamente por eso que la paciencia y el perdón son tan vitales. La paciencia es la capacidad de dejar que tu luz brille en aquellos que amas, incluso después de que se haya fundido tu fusible. Y el perdón es saber en el fondo que no tenían intención de quemar tu mecha en primer lugar.
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“Gracias por no mantener mi inmutable pasado en mi contra”. – A veces la felicidad en las relaciones equivale a hacer las paces con algo que no se puede arreglar. A veces lo dejas ir, y otras veces lo mantienes roto. En cualquier caso, equivale a perdónar.
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“Gracias por no esperar que nuestra relación sea siempre fácil”. – Las relaciones saludables no se dan simplemente. Toman tiempo, paciencia y dos personas que realmente quieren trabajar juntas para crear algo significativo y duradero.
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“Gracias por darme la soledad y el espacio que necesito”. Recuerda que es saludable pasar tiempo solo a veces Necesita saber cómo estar solo y no ser definido por otra persona.
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“Y sobre todo, gracias por ser TÚ”. Mil gracias amigo del alma por tu incondicional amistad.
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