Una gran parte de la felicidad y el éxito es dejar ir lo que se supone que debe ser tu vida en este momento y apreciarla sinceramente por todo lo que es.
A veces, todos nos sentimos menos que capaces. Sentimos que estamos luchando por hacer el más mínimo progreso. Y aunque este es un sentimiento perfectamente normal, en última instancia tienes que liberarte de él y verte a ti mismo y a tu vida desde una perspectiva más positiva.
La clave es prestar atención a las pequeñas cosas. El hecho de que no estés donde quieres estar no significa que seas un fracaso. De hecho, todo lo contrario es cierto. Ser verdaderamente feliz y exitoso hoy no significa que no desees más en el futuro, significa que estás sinceramente agradecido por lo que ya has logrado y paciente por todo lo que está por venir.
Entrena tu mente para ver el lado bueno de lo que tienes delante. La vida es una serie de miles de pequeños milagros. Fíjate en ellos. Observa una y otra vez lo afortunado que eres. La evidencia está a tu alrededor en este momento, y es hermosa, y vale la pena recopilarla en tu conciencia.
Cada mañana, cuando te despiertes, piensa en tres cosas que van bien en tu vida en este momento. Mientras te duermes todas las noches, llena tu mente de aprecio por todas las pequeñas cosas que salieron bien durante el día. Examina tus éxitos diarios.
Dale el poder de tu pensamiento a las influencias positivas en tu vida, y se harán más fuertes e influyentes cada día. Recuerda qué funciona bien y por qué, y naturalmente encontrarás maneras de hacer que muchas otras cosas también funcionen bien. La forma más eficaz de disfrutar de más éxito en la vida es no obsesionarse con lo que no ha funcionado, sino extender y expandir el éxito que ya conoces.
Aquí hay algunos recordatorios muy necesarios.
16 buenas razones por las que ya estás teniendo éxito en la vida:
- Estás siguiendo tu propio camino, no el de nadie más. – Una de las fuentes más fundamentales tanto del éxito como de la felicidad es simplemente sentirte cómodo con quien realmente eres. No cambiar tu realidad por un papel o tu verdad por un acto. No renunciar a tu libertad de pensamiento. No ponerte una máscara. Así que nunca dejes que la ignorancia, el odio, el drama o la negatividad de nadie te detengan. Si deseas hacer una diferencia en el mundo, debes seguir siendo diferente del mundo. No tengas miedo de caminar solo en tu propio camino, y no tengas miedo de que te guste.
- Gradualmente estás superando tus miedos. – Como sabes, huir del miedo es una carrera que nunca ganarás. De hecho, lo que tienes miedo de enfrentar es a menudo precisamente lo que te liberará. Así que sigue haciendo lo que has estado haciendo: da un paso más hoy. No dejes que tu miedo decida tu futuro. No dejes que te apague. En cambio, ¡deja que te despierte! Arriésgate y déjate llevar por la emoción. Dite a ti mismo que el miedo al sufrimiento es mucho peor que el sufrimiento en sí. Convéncete de que todo lo que quieres está del otro lado del miedo. Porque así es.
- No has dejado que el fracaso te detenga. – Cada éxito tiene un rastro de fracasos detrás y cada fracaso conduce al éxito. A menudo, nuestra mayor percepción proviene de nuestro fracaso, no de nuestros logros. Es cuestión de tomar cada lección y avanzar con ella. Al final del día, ya sea que elijas seguirlo, fluir con él, resistirlo, cambiarlo o esconderte de él, la vida continúa. Si lo que hiciste hoy no salió como esperabas, mañana es una nueva oportunidad, inténtalo de nuevo o haz algo totalmente diferente. Lo importante es darse cuenta de que tienes una opción.
- Aprendes algo nuevo y te haces más fuerte cada día. – Para encontrar el mejor camino a seguir, de vez en cuando debemos desviarnos de él. No hay giros en falso; solo caminos que no sabíamos que estábamos destinados a caminar. Al final, para tener éxito no tienes que ser perfecto, solo tienes que seguir siendo perfectamente capaz de mejorar. Sigue permitiendo que tus errores te fortalezcan. La vida es una serie de pequeños viajes. Permite que cada paso sea un momento de aprendizaje. Y no confundas tu camino con tu destino. El hecho de que a veces estés tormentoso no significa que no te dirijas al sol.
- Has superado algunos obstáculos considerables. – Nada es tan malo como parece. ¡Nada! Hay un beneficio y una bendición escondidos en los pliegues de cada experiencia y cada resultado. Considera la posibilidad de que los pequeños obstáculos en el camino de tu vida no sean obstáculos en absoluto, sino escalones hacia lugares asombrosos.
- Haces todo lo posible por amar lo que es. – Una gran parte del éxito y la felicidad no es obtener todo lo que deseas, sino querer conscientemente lo que obtienes. Después de todo, el estrés es resistencia a lo que es. Continúa aceptando lo que te viene total y completamente, para que puedas apreciarlo, aprender de ello y luego dejarlo ir. A veces, la mejor respuesta posible es simplemente permitirte estar en paz con lo que es, en lugar de desear y lamentar lo que no es. Se trata de hacer lo mejor que puedas con las cartas que te han repartido.
- Intentas estar lo más presente posible. – Todos tenemos dos vidas. Y la segunda empieza ahora, cuando nos damos cuenta de que solo tenemos una. Realmente, nada vale más que hoy. Porque no puedes cambiar el ayer o predecir con precisión el mañana, pero puedes arruinar el hoy, tu vida real, preocupándote por esas dos eternidades ilusorias. Así que mantente presente y concéntrate en lo que puedes crear hoy. El mañana se revelará exactamente como debería, como ya lo hizo ayer.
- Primero te amas a ti mismo, en lugar de amar la idea de que todos los demás te amen. – Ponerse a sí mismo en primer lugar no significa ser “egoísta”. Significa ser consciente de sí mismo. Significa no olvidarte nunca de amarte a ti mismo también.
- No juzgas a la gente. – Las personas a veces son demasiado rápidas para juzgar, pero lentas para corregirse. Tu sabes esto y amablemente haces lo contrario. Realmente es impresionante. Porque es mucho más fácil juzgar a las personas que comprenderlas. La comprensión requiere más amabilidad y paciencia, y este “extra” vale la pena. Este “extra” hace una gran diferencia al final.
- Tú eres la razón por la que algunas personas sonríen. – No pierdas la oportunidad, ni una sola y pequeña oportunidad, de decirle a alguien lo maravillosos que son y lo hermosos que son, por dentro y por fuera.
- Tienes gente increíble en tu vida. – Tu capacidad para ser eficaz y feliz está directamente relacionada con la calidad de las personas que más te rodean cada día. Tener solo una o dos de estas personas a una llamada telefónica es realmente una bendición invaluable. Vale la pena celebrar estas relaciones.
- Has sido desinteresado en tus relaciones más cercanas. – Casi todas las acciones inmorales jamás cometidas se remontan a un motivo egoísta. Es un rasgo que odiamos en otras personas, pero que a menudo justificamos en nosotros mismos. El hecho de que hayas hecho sacrificios por las personas que amas es notable en todos los sentidos. Sé que no es fácil. Es una de las partes más difíciles de amar a alguien: tienes que renunciar a las cosas por esa persona. Y a veces, incluso tienes que renunciar a ellas, desinteresadamente.
- Has dejado de hacer cosas por los demás por culpa. – A veces cedemos a las peticiones de nuestros ser queridos por culpa. Pero tenemos que dejar de sentirnos culpables por no darles a las personas que nos importan todo lo que quieren. A veces es una píldora difícil de tragar, pero fomentamos la actitud de derecho en nuestras vidas y relaciones cuando estamos gobernados por una conciencia culpable. Está bien decir “no” a los amigos y familiares a veces. Esto lo sabe, así que sigue haciendo lo que sabes que es correcto y nunca dejes que la culpa falsa se apodere de ti.
- No estás gastando demasiado para impresionar o satisfacer a los demás. – Creo que es bueno para nuestros amigos y familiares escucharnos decir: “No puedo pagar eso” o “Tendremos que ahorrar para eso”. Porque esa es la vida real. No tenemos todo el dinero del mundo para comprar todo lo que podamos desear. Si lo piensas bien, apuesto a que has conocido familias que tienen varios trabajos para conducir autos de lujo y mantener a sus hijos en costosas actividades, cuando honestamente, todos serían más felices y estarían mejor con más tiempo para la familia y las amistades y menos estrés financiero.
- Te respetas lo suficiente como para no dejar que nadie te pisotee. – Un simple recordatorio, pero muy importante: nunca, nunca sometas tu autoestima o valores morales a una relación. El verdadero amor y la amistad solo pueden florecer bajo el sol del respeto mutuo. Algunas personas pueden tratar de pisotear tu jardín y caminar sobre ti, pero no tienes que aceptarlo. Punto.
- Sabes que no puedes complacer a todo el mundo y no lo intentas. – Así es. Mantente firme. No dejes que las opiniones negativas de los demás te descarrilen. En última instancia, hay dos tipos de personas: las que agotan su energía y fuerza creativa, y las que te dan energía y apoyan tu crecimiento. Evita el primer tipo. Que los puentes que quemas alumbren tu camino. Simplemente sé feliz, sé honesto y sé fiel a ti mismo todos los días. Si a otros no les gusta, déjalos en paz. El éxito en la vida no se trata de complacer a todos.
Ahora es tu turno…
Si no puedes marcar todos los puntos de esta lista, no es gran cosa. Esta lista es solo una guía aproximada. Todos necesitamos nuestro propio tiempo para recorrer nuestra propia distancia, nuestro propio camino. Pero ten en cuenta que el principio aún se aplica:
El éxito no es una habilidad; es una actitud persistente. No es un lugar al que llegas; es un proceso que vives. Es lo que haces todos los días. Es lo que estás haciendo ahora…
Estás triunfando en la vida. Solo tienes que creerlo.
¿Cuál es una parte positiva y exitosa de tu vida que a menudo pasas por alto?
