Más De 41 Oraciones Edificantes Para El Sábado

Este sábado por la mañana, trabaja en tu desarrollo mental. Esforzarse por alcanzar la paz y la satisfacción. Aquí hay algunas oraciones que pueden ayudarlo en el proceso. Orar regularmente es extremadamente beneficioso para un sistema mental saludable. Calmará tu mente y te preparará para el día que estás a punto de comenzar.

Aquí Hay Oraciones Edificantes Para El Sábado

-Oh Padre Todopoderoso, este sábado por la mañana, te pido que me cures de mi ansiedad por cualquier cosa en mi vida. No importa cuál sea la situación, mantengo completa confianza en oración y petición a ustedes. Os agradezco vuestra grandeza y os presento mis deseos.

-Oh Padre Todopoderoso, quiero que mi mente, corazón y alma sean custodiados por tu paz que supera todo mi entendimiento. La paz de Dios es muy importante para nuestra propia existencia como seres humanos. El Padre Celestial es nuestro protector y le expresamos gratitud y respeto.

-Oh Padre Todopoderoso, ¿cómo podría agradecerte lo suficiente por regalarme este brillante sábado? Llegó el fin de semana y lo comienzo rezándote para que me vigiles a mí y a mi familia. Protégenos cuando estemos afuera y derrama tu alegría en nosotros.

-Oh Padre Todopoderoso, antes de comenzar mi día, solo quiero orarte para que me permitas escuchar tu voz constantemente. Haz que se escuchen esas palabras que generalmente pasamos por alto y seamos capaces de identificar tus señales y milagros. Hagámonos seres humanos más atractivos.

-Oh Padre Todopoderoso, te pido que me des este sábado como un día para descansar el cuerpo y la mente. Dame paz y satisfacción, y disfrutar de las cosas buenas de mi vida. Cada momento cuenta en este dichoso mundo tuyo y no quiero desperdiciarlo.

-Oh Padre Todopoderoso, ayúdame a esforzarme en tu mundo y romper con todo lo que me preocupa o me estresa. Déjame tener fe en ti y saber en mi corazón que nada de lo que hagas está mal o puede causarme algún daño. Sé que me protegerás, pase lo que pase.

-Oh Padre Todopoderoso, cada aspecto de mi vida te pertenece. Mis pensamientos y acciones, mis movimientos, todo está guiado por ti y tus enseñanzas. He confiado mi vida en ti y sé que nada puede salir mal cuando el poder descansa en ti y estás trabajando para mí.

-Oh Padre Todopoderoso, este sábado por la mañana, me presento ante ti y me inclino ante ti. Te ruego que bendigas mis ojos y oídos para que pueda ver y escuchar las cosas más pequeñas que tu espíritu hace o dice. Déjame experimentar Tu presencia en mi alma bendita.

-Oh Padre Todopoderoso, solo quiero que me tengas cerca de ti para poder sentirte conmigo cuando quiera. Quiero ser testigo de tu bondad y gracia y ser considerado tu hijo bendito. Quiero rezarte con un corazón agradecido.

-Oh Padre Todopoderoso, este sábado me está motivando y dándome una buena vibra sobre sí mismo. Sé que este día es genial porque tú mismo lo has bendecido. Nunca pierdo la fe porque eres mi compañero y guardián constante. Como nos prometiste, nunca nos dejarás.

-Oh Padre Todopoderoso, no importa la edad que tenga, nunca podré caminar solo, sin ti a mi lado. Hoy te pido que seas mi guía y mentor y me muestres el camino correcto para conducir mi vida. Sus decisiones son incuestionables y las seguiré rigurosamente.

-Oh Padre Todopoderoso, dame el poder de escuchar tu llamado. Permíteme lograr todo lo que siempre he querido y ayúdame a lograr mis avances. Nunca podré lograr el éxito sin su ayuda, por lo que les pido sus bendiciones y les pido que estén conmigo.

-Oh Padre Todopoderoso, por mucho que te alabo o celebre tu gloria, nada será suficiente para expresar lo que verdaderamente siento. Todo lo que puedo hacer es expresar gratitud y pedir tu gracia sobre nosotros. Gracias por ser la guía y maestra más increíble para mí.

-Oh Padre Todopoderoso, si no fuera por ti, nunca hubiera podido entender de qué se trata esta vida. Gracias por permitirme identificar el verdadero propósito de mi vida, entender cuáles son mis metas y dejarme ver qué es lo que me apasiona.

-Oh Padre Todopoderoso, este sábado por la mañana, solo puedo pedirte que transformes mi corazón y mi alma a tu semejanza. Crece en mí esta hambre que anhela tu palabra y quiere conocer los secretos más profundos de este Universo. Purifica mi alma y déjame brillar más intensamente.

-Oh Padre Todopoderoso, ¿cómo puedo ser más como tú? ¿Cómo puedo sentirme más unido a ti? Quiero que me enseñes todo lo que quiero aprender. Señor, desarrolla mis virtudes y lléname de las cualidades que hacen a un ser humano completo y verdadero.

-Oh Padre Todopoderoso, enséñame la bondad y la misericordia, de las que tú tienes y predicas. Ayúdame a ser honesto y tener integridad y caminar por el mundo con un corazón audaz y sensible. Que nada me detenga y nunca dejes que tenga miedo de nada que se cruce en mi camino.

-Oh Padre Todopoderoso, quiero que todos sepan que soy parte de ti. Deja que actúe como una extensión de tus sentidos, tu presencia en este mundo. Permíteme difundir tu dichosa palabra a otros para que ellos también puedan recibir tu misericordia y bendiciones, como yo.

-Oh Padre Todopoderoso, te estoy muy agradecido por tu grandeza y salvación. Eres el mejor Señor y estoy muy agradecido de que seas parte de mi vida. Eres mi tesoro más preciado. Señor, bendícenos para que podamos ser dignos de tu amor.

-Oh Padre Todopoderoso, bendíceme para que solo tenga mis ojos y oídos para ti. Haz que mi corazón sea firme y nunca debo perder mi firme fe en ti. Te alabo profundamente por tu precioso nombre y la gloria que tienes. Tú eres nuestro Señor y nuestro Salvador.

-Oh Padre Todopoderoso, gracias por ayudarme y estar conmigo en mis momentos de necesidad. Gracias por guiarme hacia la luz y por quitar toda la oscuridad de mi vida. Estoy muy agradecido contigo en la vida por todo lo que has hecho por mí hasta ahora.

-Oh Padre Todopoderoso, siento tanta felicidad en mi corazón al saber que te amo. Me hace sentir más cerca de ti y me bendices con tu amor incondicional. Eres mi rayo de sol, mi bendición en la vida, y solo obtengo esperanza y alegría de ti.

-Oh Padre Todopoderoso, Dedica este sábado enteramente a ti. Eres verdaderamente maravilloso a tu manera. Mi corazón se extiende para glorificarte y alabar tu nombre. Nadie podrá jamás ocupar el lugar que tienes en mi corazón. Gracias por todo lo que haces por mí todos los días.