Nuestras mascotas son muy cariñosas con nosotros y casi se sienten como parte de nuestra familia. Nos dan alegría y nos calman en nuestros tiempos difíciles. Entonces, cuando oramos a nuestro Querido Dios, también debemos orar en nombre de ellos para que Dios los cuide.
Aquí Hay Oraciones Edificantes Para Mascotas
-Querido Gran Dios, tu infinito amor y cuidado se extienden a cada miembro de nuestra familia. Nuestra mascota es muy querida y pensamos que es una parte importante de nuestra familia. También te rogamos por su bienestar porque también es digno de recibir tu amor lleno de gracia.
-Amado Padre, ante tu mirada compasiva, todo ser viviente es muy precioso, y tú lo cuidas por igual. Nuestra mascota se coloca ante ti para que tu deporte vigilante pueda protegerla de todos los peligros. Bendícenos para que puedas ser tus agentes para cuidarlo adecuadamente.
-Señor Todopoderoso, creemos que somos los administradores de nuestra mascota, y debemos actuar en tu nombre para cuidarla. Entonces, guíanos para que podamos seguir tus instrucciones y tratarlo con amor y cuidado. Nos comportaremos como usted quiere que lo hagamos.
-Querido Padre, te pido que cuides de nuestra mascota cuando está enferma/cansada. Obra tu Santa Voluntad también a través de su vida y devuélvele la fuerza que ha perdido. También oramos por los demás animales que viven en este mundo y necesitan tus bendiciones.
-Amable Dios, te pedimos que cuides de todas las mascotas del mundo y te asegures de que nosotros, los seres humanos, seamos sensibles y compasivos con ellas. Seamos capaces de descansarlos con amor y respeto porque se lo merecen. Amamos mucho a nuestra querida mascota.
-Padre Amado, alabamos tu Santo Nombre por bendecirnos con el regalo de estos hermosos animales que traen tanta alegría a nuestras vidas. Nos alegra tanto pensar que ellos también han sido creados por tus poderosas manos, y van por tu camino dirigidos por ti.
-Oh Señor amoroso, te pido a tu Espíritu Santo que cuide de nuestra pequeña mascota en todo momento, incluso cuando estemos allí para ello. En todo buen momento y siempre que esté afligido por algo, quiero que en él prevalezca vuestro buen espíritu para que todo quede bien para siempre.
-Gran Todopoderoso, te pido que me hagas un cuidador paciente y amoroso de mi mascota para que pueda aceptar con gusto todo lo que haga, considerándolo parte de tu Voluntad y devolverle la alegría y el calor que trae a nuestro vive todos los días.
-Oh Padre, te pido que nos ayudes a hacer muy visible nuestro cariño por la pequeña mascota. Deja que nuestra sensibilidad y amor hacia él lo toque muy profundamente y nos bendiga para que podamos transmitir tu amor piadoso que es tan puro por el animal a través de nuestras acciones regulares.
-Oh Dios bondadoso, te rogamos que vengas a nuestra mascota con tu amor y cuidado incondicional cuando se sienta incómoda. Protégelo de los peligros y cúralo de sus heridas. Tenemos plena fe en tu compasión sobrenatural que se abre camino sin esfuerzo a través de todas las criaturas vivientes.
-Padre bondadoso, nuestra mascota no se mantiene muy bien y estamos profundamente preocupados. Te rogamos que lo cuides para que podamos organizar su cuidado adecuado en el momento adecuado. Mantén tus ojos vigilantes sobre los veterinarios y enfermeras a cargo de su tratamiento médico.
-Querido Todopoderoso, ayúdanos a identificar el motivo del malestar de nuestra mascota y abordar la causa adecuadamente. Ayúdanos a crear un ambiente dentro de nuestra casa que se adecue a las necesidades de nuestra mascota y la haga sentir cómoda conviviendo con nosotros. Queremos darle al animal un amor infinito.
-Gran Deidad, hemos traído a este animal como mascota, y ahora, como mayordomos, debemos velar por su bienestar y sus deseos. Cuidar de una mascota es casi como cuidar de un niño, y te pedimos que nos des la sensibilidad y sabiduría que creas necesaria.
-Precioso Señor, es cierto que todo ser viviente que ha venido al mundo debe morir. Nuestra mascota probablemente también nos dejará algún día. Te rogamos que lo bendigas con largos años para que podamos pasar más tiempo con él y crear muchos hermosos recuerdos juntos.
-Oh Padre Amado, te rogamos que nos des sabiduría para que nunca demos por sentado a nuestra adorable mascota. Validemos su presencia en nuestras vidas y demosle reconocimiento y amor. Mantenemos a nuestra mascota ante ti para que la bendigas con tu gracia.
-Buen Creador, así como te pedimos que llenes nuestras vidas de felicidad, calidez y paz, te pedimos que hagas lo mismo con nuestra querida mascota. También es un ser dedicado, una parte de tu poderosa creación, y busca tu compasión piadosa de una manera única.
-Dios celestial, rogamos que nuestra mascota sea digna de ser bendecida con tu misericordia. Oramos por su vida hermosa y alegre, donde vive entre el calor del compañerismo humano. Te rogamos que cuides de nuestra mascota para que pueda terminar su vida en paz.
-Oh Amado Señor, nuestra mascota es muy importante para nosotros. Cuando lo vemos en apuros, se nos hace el corazón. Por eso, te rogamos que estés presente en su espíritu con todo tu poder y erradiques todos los sufrimientos de su vida para que pueda volver a ser feliz.
-Padre Todopoderoso, nuestra mascota, ha sido una gran fuente de alegría y esplendor. Regresar a casa después de un día de arduo trabajo y pasar un tiempo con él nos hace sentir renovados y felices. Gracias por bendecirnos con un amor tan grande. Te rogamos por su bienestar.
-Amado Maestro, te rogamos hoy para que nuestra mascota también pueda asegurarse un lugar en tu gracia celestial. No pueden hablar ni actuar como nosotros, pero las emociones que quieren transmitirnos son muy claras. Nuestra mascota nos adora y admira tanto como nosotros.
-Bendito Buen Dios, en mis tiempos de pura depresión e infelicidad, cuando no había nadie que me apoyara o cuidara, mi mascota ha sido muy motivadora. Me ha atravesado, y estar con él me ha dado alegría y fortaleza mental. Bendice al pequeño, Padre.
-Oh Gran Salvador, no importa cuánto amemos o cuidemos a nuestra mascota, tus caminos obrarán a lo largo de su vida. Pero, confiamos en que solo tienes cosas buenas guardadas para él, y mientras estés allí, no tenemos que preocuparnos por su seguridad.
-Oh Todopoderoso Protector, gracias por crear a cada animal que es parte de tu bendita creación y enviarlos a nuestras vidas. Con nuestro poeta como parte de nuestra vida y miembro del hogar, nuestras vidas y el hogar parecen estar más completos que antes.
-Amado Padre, estamos muy agradecidos de darnos cuenta de que la vida de este hermoso animal ha sido dada por ti, y trabajas todos los días para que sea mejor. La has colmado de buenas virtudes, y nos has bendecido a todos. Gracias por este regalo de la vida.
-Señor Celestial, el amor y el resplandor que recibimos de nuestra mascota es raro, y es lo más preciado que hemos encontrado. Consideramos esto como uno de sus mayores favores en nuestras vidas, y le estamos agradecidos por brindarnos siempre grandes cosas para experimentar.
-Buen Creador, cuanto más veo y paso tiempo con nuestra amada mascota, más asombrosamente me impresionan tus maravillosas creaciones. Cada criatura moldeada en tus benditas y santas manos destila belleza y perfección, y te damos todas las alabanzas por ello. Tu glorioso Universo tiene mucho que dar.
-Oh Padre, queremos que nos guíes adecuadamente para que podamos convertirnos en dignos mensajeros de tu afectuoso amor en el mundo y difundir la Santa Palabra de amor que hablas en nuestras almas también a nuestras mascotas. Seamos capaces de reflejarles tu amor.
-Amado Dios querido, miramos a nuestra mascota como tu expresión de amor y positivismo en las criaturas. Con nuestra mascota a nuestro lado, nunca hay un momento aburrido, y siempre estamos felices de disfrutar de su compañía. Gracias por dejarnos sentir tu santo amor a través de estos animales.
-Padre Amado, oramos por el cuidado vigilante de tu Santo Espíritu sobre nuestra mascota para que su salud esté siempre protegida. Dale la fuerza para sobrevivir en el mundo tailandés y permítele sentir nuestro amor con mucha gracia. Mantenlo alejado de todas las cosas que dan miedo o dolor.